jueves, octubre 22



-Estar enamorada no es fácil. No basta con desearlo, hay que oírlo.




¿Tú conoces algo que dure siempre?

—He cambiado mucho.
—¿Tanto?
—Del todo.

-Salta por la ventana. ¡Valiente!

-Me encanta que haga frío

-Cuando es que no, es que no.

-Nunca he tenido el corazón tan rojo.

-Es bueno que las vidas tengan varios círculos. Pero la mía, mi vida, sólo ha dado la vuelta una vez y no del todo. Falta lo más importante. He escrito tantas veces su nombre dentro. Y aquí, ahora mismo, no puedo cerrar nada. Estoy solo

Voy a quedarme aquí todo el tiempo que haga falta. Estoy esperando la casualidad de mi vida, la más grande, y eso que las he tenido de muchas clases. SI. Podría unir mi vida uniendo casualidades. La primera y la más importante fue la peor…

-Cuando hace frío la mayoria de las cosas van más deprisa o llegan antes, me refiero a las casualidades. Me encanta que haga frío.

-… así que me dío un vuelco la vida.

-Murió de amor limpiando una lechuga.

-Sentí que algo conocido se había metido dentro de lo desconocido, había llegado al fin de algún sitio. Tuve un pálpito, fue el primero de muchos.

-La casualidad que estabamos esperando.

- Hola estoy aquí. Soy Ana, pues dime algo.
- Me llamo Otto.
- ttttt ¿¿Sabes como te llamas??
- No, bueno sí.
- ¡¡OoOottOoOo!!
- Siiiiii.
- Oye Ana también se puede leer al revés.
- Pues claro.
- Que bien, es capicúa.
- Ahora te enteras…
“Ahora te enteras, mi padre me decía que mi nombre era capicúa para que mi vida se llenara de suerte… así que me dio un vuelco… la vida.”

(Los amantes del circulo polar)

No hay comentarios:

Publicar un comentario